En la lejanía de inhóspitos desiertos,
habita un extraño ser,
no es siniestro su parecer,
pero posee un noble y bello corazón,
éste ser tan inusual y a la vez tan peculiar,
ayuda a las personas,
seres que caen en dicho mundo,
pues socorre sus almas
y sustenta sus vidas por aquel momento,
momentos de desventura y dolor...
Es una criatura maravillosa,
y en su corazón, solo habita la bondad,
sus ojos son negros como la noche,
y su apariencia es la de un ser solitario...
Él… Espera siempre por alguien,
acude en ayuda rápidamente,
su tierna mirada es sumamente triste,
pero al mismo tiempo sincera,
sus mil y una noches son largas y solas,
pero siempre lee su viejo libro,
uno de aquellos que le faltan las hojas,
su nombre… “Kitaro”...
y vive en el desierto de nuestras almas,
está allí… Cuando nos ahogamos,
en las arenas de la vida…
Él siempre extiende sus manos,
y nos ayuda a salir del ardiente calor
del desierto de la soledad y del dolor…
¡Kitaro del desierto!, un amigo fiel,
un amigo, como ningún otro.
Autor del escrito:
Dante Moshue Díaz Linares (Conde Apocalíptico)
Dante Moshue Díaz Linares (Conde Apocalíptico)
Derechos Reservados - 17/06/2011.
assim seja!
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