Dante Moshue Díaz Linares (Conde Apocalíptico)
Escritor, poeta, narrador de melancolías...
Déjame Corromper tus oídos con palabras de otro tiempo,
sepultando lo presente en el oscuro abismo del olvido.

 
¡Nota Importante!
Dale clic a los botones "Me gusta" y "Seguir" de Facebook,
para estar al tanto de mis próximos escritos.

miércoles, 10 de agosto de 2011

El triste cantar de un viejo violín

¿Para qué poner una canción en tu ventana?
Si vos las ignoráis y muchas veces las olvidáis,
así como pierdes mis preciados dichos,
Los cuales son enterrados en la tierra
y muchos otros sumergidos
en el oscuro mar del eterno olvido…
¿Como puedes esconder
el delicado rose de mis palabras?
Las cuales acarician vuestro corazón…
En tus días de melancolía y de gran dolor…
Pero ahora solo queda un espasmo vacío,
un delirio en la oscura noche,
tan estremecedor que dicho llanto
enfría a mi alma, poco a poco…
Déjame partir, déjame ir…
Ir en busca de mi verdadero destino.
Tal vez allá afuera, encuentre mi camino...
Pero siempre te llevare en mi corazón...
Siempre, siempre, te guardare en mis recuerdos…
Las gotas del amargo llanto
inundan mis ojos porque sé, que mi alma
Será vuestra para siempre, para siempre…
Pero aún así debo de partir,
para que encuentres la felicidad,
con un verdadero amor, el cual esta allá afuera…
Buscándote y también anhelando encontrarte...
Llegara pronto, apenas yo me vaya,
y llegara para que le cantes las canciones
de vuestro infinito amor…
Y le bailes la dulce alegría de vuestro corazón…
No quiero irme, no quiero apartarme de ti...
Pero debe ser así, pues solo soy un triste hombre
que no logra cautivar por completo
vuestra dulce y preciada alma…

Autor del escrito:
Dante Moshue Díaz Linares (Conde Apocalíptico)
Derechos Reservados - 26/07/2011.

El triste cantar de un viejo violín

No hay comentarios:

Publicar un comentario

COMPARTIR ESTE BLOG EN :

COMENTARIOS DE FACEBOOK

Comentarios de Facebook

Dale Clic a los Botones:
"Me Gusta" y "Seguir" de Facebook y Twitter
para estar al tanto de mis próximos escritos.